Me senté sin prestar atención a aquel profesor monótono. Lancé una rápida mirada a Mitchell, que parecía contento (sí, se la había tirado la noche pasada) y tomaba apuntes. Lanzó una ojeada alrededor, molesto, mirando a los que fumaban (lo había dejado cuando volvió, era indignante). Probablemente le parecían máquinas, imaginé. Igual que chimeneas, les salía humo por ese agujero que tenían en la cabeza. Miró a aquella chica tan fea del vestido rojo tratando de parecer indiferente. Yo miré las pintadas que había en la mesa: "Has perdido." "No hay gravedad. Es la Tierra la que chupa." " La Banda de la Tachuela durmió aquí." "¿Qué fue del amor de los hippies?" "El amor apesta." "La mayoría de los taxistas son licenciados." Y me quedé allí sentado sitiéndome el amante desgraciado. Pero luego me acordé de que, claro, ahora tan sólo soy desgraciado.
(Paul Denton)
Las leyes de la atracción. Bret Easton Ellis.
Photo
Hace 8 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario